¿Estás pensando en dar a tu perro dieta BARF pero no sabes cómo hacerlo o no tienes tiempo para preparar las raciones? La dieta Yum es la alternativa perfecta disponible en España para aquellos que quieren dar dieta cruda a sus perros, con todos los beneficios que conlleva ello y sin los engorrosos inconvenientes de la dieta BARF casera.
Tuve el placer de asistir a unas charlas sobre alimentación natural en mascotas organizadas por la clínica veterinaria de nuestros perros, Veterinarea, donde Manuel y sus hijos, creadores de esta nueva forma de alimentar a los perros nos explicaron cómo surgieron, en qué se basan, los beneficios que han observado en sus propios perros y en otros, etc.
La familia de Manuel es una familia ganadera de Zaragoza que desde hace muchos años se dedica a la alimentación humana. De la afición a sus perros y de la preocupación por darles una alimentación lo más cercana a lo natural (lo que comerían los perros si vivieran en el medio natural), surgió la idea de proporcionarles una dieta a base de carne dado que los perros son eminentemente animales carnívoros.
Más en detalle y de un modo práctico, la dieta Yum se suministra en bolsas de 500 gr o de 2 kg de comida cruda que la compras congelada. Hay muchas recetas diferentes para que puedas ir variando a tu perro y ajustarle así a sus necesidades. Todas están formuladas para que contengan la cantidad necesaria de nutrientes que necesita tu perro, por lo que siempre le estás dando un alimento equilibrado. El único trabajo que conlleva es descongelar previamente la ración diaria, idealmente en el frigorífico o a temperatura ambiente, antes de dárselo a tu perro. Respecto a la cantidad que debes suministrar, como orientación se dice que deberás dar de un 2% a un 3% respecto al peso del animal.
Dos bolsas de dieta Yum con dos menús diferentes.
Los ingredientes usados en la dieta Yum son pollo, ternera, salmón, cordero, buey, pavo, tripa verde (aporta probióticos de origen natural excelentes para el tracto digestivo), potro, corazón, hígado, molleja, cartílago, sardina, zanahoria, remolacha, nabo, manzana, calabaza, cáscara de huevo, spirulina (un alga microscópica rica en vitaminas y minerales muy usada en complementos de las dietas caninas), ajo, aceite de oliva y aceite de salmón. Los menús disponibles combinan varios de estos ingredientes dependiendo de la variedad que se trate. Todos los menús contienen un mínimo de 80% en carne. En ningún caso contienen cereales.
Manuel y su familia aseguran que todos los ingredientes usados en la fabricación son aptos para consumo humano, tienen número de trazabilidad y tanto la las instalaciones como los alimentos procesados bajo la marca dieta Yum, cuentan con todos los controles sanitarios del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente. Por tanto, no hay que tener ningún reparo en este aspecto.
La naturalidad es la cualidad que destaca en este tipo de alimentación. La dieta Yum no contiene aditivos químicos, colorantes o conservantes. Y como no sufre ningún tipo de procesamiento térmico, al contrario que ocurre con el extrusionado de los piensos, mantienen todos los nutrientes originales presentes en sus ingredientes.
Beneficios de la dieta Yum para tu perro
Los beneficios que se obtienen con esta dieta son:
Mejor digestión. El tracto digestivo del perro es corto en comparación del nuestro (omnívoros) y por supuesto con el de los herbívoros. Al no tener carbohidratos, la digestión se realiza en tan sólo 4-5 horas en comparación con las 12 que puede tardar la digestión de un pienso rico en cereales.
A consecuencia de ello, se reducen flatulencias y las heces son más pequeñas y de menor olor, ya que también la digestibilidad es mayor.
La carne es un alimento de alto valor biológico, con proteína que aporta todos los aminoácidos esenciales al organismo del perro, mejorando su salud en general, su estado físico (piel, belleza del pelo), rendimiento en competiciones, etc.
Refuerza el sistema inmunológico, aportándole una resistencia natural a enfermedades, parásitos.
Se reduce el riesgo de alergias alimentarias, cada vez más presente en nuestras mascotas.
Desarrollan más masa muscular y optimiza la existente.
Mejoran enfermedades crónicas como dermatitis, placa dental, artrosis, etc.
Por supuesto, puede darse el caso de que perros que cambian a la dieta Yum después de haber estado comiendo pienso toda su vida presenten algún problema de gastroenteritis. Para ello, se puede introducir de forma gradual la comida fresca para ir reduciendo el pienso poco a poco. Realmente hay pocos perros que la rechacen, les suele encantar.
Respecto al precio de la dieta Yum, para un malamute de unos 35 kg viene a costar alrededor de los 2 euros al día aunque siempre se podrá encontrar una oferta mejor. Esto supone un coste muy similar al de un pienso de alta gama, por lo que no hay inconveniente en este aspecto.
¿Algo en contra?
La mayor pega, es a mi parecer, que precisamente de que se trata de una dieta fresca, en el sentido de que si tienes que ir de viaje es engorroso llevarla, porque se va a descongelar y tendrás que estar pendiente de su correcta conservación. Por ello, en estos casos quizás debas volver a dar pienso a tu perro, aunque sea de forma temporal. También tienes que tener espacio suficiente para la cámara congeladora (que te suministran con tu pedido) que necesitas para mantener las raciones.
Pero en conjunto, la dieta Yum supera el resto de inconvenientes de la dieta BARF: no tienes que ir a proveedores de materias primas (carnicerías, pollerías, etc), no pierdes tiempo formulando las raciones diarias de comida de tu perro, no tienes dudas de si le estás dando una dieta equilibrada y su suministro es más rápido y cómodo.
Así que en definitiva. Si quieres dar a tu perro una alimentación más natural sin muchas complicaciones, la dieta Yum es un gran invento. ¡Y encima 100% made in Spain!
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